La adolescencia es una de las etapas más complicadas por las que pasa
un ser humano. El paso de la niñez a la madurez, los amigos, salir de fiesta,
el instituto…Una serie de factores confluyen para que esta etapa sea difícil
digestión para muchos jóvenes y sus padres.
La alimentación también influye
en esta etapa de la adolescencia, ya
que los jóvenes comienzan a tener hábitos de forma independiente, fuera del
estricto régimen alimentario que
tienen en su casa, al comer con sus padres. Los jóvenes pasan más tiempo fuera
de casa, y por lo tanto, la oferta
alimenticia cambia: las chucherías, bollería industrial, comida rápida,
pizzas con los amigos…
La ingesta de calorías aumenta, y
más si cabe, ya que la adolescencia
es una etapa en la que los jóvenes necesitan ingerir una mayor cantidad de alimentos. Eso se traduce
en una mayor ingesta de proteínas, carnes, bollería, lácteos…¡Los jóvenes no
paran de comer!
La publicidad y la televisión
también juegan un papel importante, ya que los adolescentes desean parecerse a esas personas guapas y delgadas que
aparecen en los programas, series, cine y publicidad. Son modelos a seguir y es
una de las razones para para cambiar sus patrones
alimenticios. Por no hablar de gustar a una chica o un chico. En esta etapa
es cuando los casos de anorexia o
bulimia empiezan a dar sus primeros síntomas. Y si no son tratados a tiempo
se arrastrarán durante muchos años, o en el peor de los casos, toda la vida.
¿Y qué papel juegan los padres en
todo esto? Un papel fundamental, ya que son los primeros que deben transmitir
su experiencia y conocimientos a sus hijos. Deben ser los primeros en dar
ejemplo, llevando unos buenos hábitosalimenticios en el hogar, desde el desayuno hasta la cena. Así, esos
hábitos pueden ser adquiridos por sus hijos como modelo de buena alimentación. Es
habitual que los hijos se rebelen ante sus padres, y hacerlo también con la alimentación.
En ese caso, la única
receta que existe es mantener la calma y tener paciencia, dándole a sus hijos
toda la información necesaria para transmitirles que una buena alimentación es
básica para llevar una vida saludable.